Frases de Cielo
Frases sobre «Cielo»
Te espero cuando miremos al cielo de noche: tu allá, yo aquí.
En tu mente puedes imaginar que la conciencia, Dios, la verdad o el cielo están ahí arriba, en alguna parte. Pero, en realidad, ¿donde comienza? ¿Donde acaba? ¿Esta ausente el cielo de la conciencia? No, nunca esta ausente.
El pendón oculto se halla izado en el templo del cielo.
Trata siempre de estar en comunión con cielo y tierra, de este modo el mundo se presentara en su verdadero aspecto. La presunción se desvanecerá y podrás armonizar con cualquier ataque.
Cuando te das cuenta de lo perfecto que es todo, inclinaras la cabeza hacia atrás y reirás al cielo.
La rueca del amor, hecha con las joyas del saber, gira en el cielo.
La espiritualidad no se trata de Dios o del cielo , se trata solo de dirigirse al tu básico tal como eres, tu naturaleza original.
¿De que desierto antiguo eres memoria que tienes sed y en agua te consumes y alzas el cuerpo muerto hacia el espacio como si tu agua fuera la del cielo?
Todo aquel que hace la voluntad de mi Padre que esta en lo cielos, ese es mi hermano, y mi hermana, y mi madre.
No quiero comprometerme con el cielo y el infierno, tengo amigos en ambos lugares.
Ponga un pez en la tierra y el recordara el océano hasta el día de su muerte. Coloque un pájaro en una jaula, y aun así, el pájaro nunca se olvidara del cielo.
No tengas miedo de nada. Harás un trabajo maravilloso. Sin Miedo es lo que trae al Cielo incluso en un momento.
La vida esta absolutamente equilibrada entre lo positivo y lo negativo. Ahora es tu elección decidir de que lado quieres estar: en el cielo o en el infierno.
Eres absolutamente libre para crear en tu vida un cielo o un infierno. Vive como si no lo hubiera. Como si esta fuera tu única oportunidad de disfrutar, de amar, de existir.
Uno en las comunas sube hacia el cielo pero bajando hacia los infiernos.
Los pensamientos son como nubes: van y vienen, y tu eres el cielo. Al sentir que van y vienen y que tu eres un observador, un testigo, se adquiere dominio sobre la mente.
Dejad que los niños lleguen a mi, porque de ellos el reino de los Cielos.
Que interesantes y encantadores son los juegos del cielo, el agua y la tierra…, precioso espejo donde se refleja ese otro mundo mas alto que es la meta de nuestra fe y nuestros sueños.
Donde el águila descansa de grandezas y de cielo, a esa altura de la piedra a veces me entrego al sueño.
Ningún dios bajara del cielo para iluminarnos. Debemos de hacerlo por nuestra cuenta. Este es el motivo por el que Buda dijo que somos nuestros propios responsables.