Citas robert bly
- No preguntes por que los elefantes usan zapatos tan grandes, y por que los canguros renacen secuestradores, y por que los pájaros de vela son todos románticos.
- Cada parte de nuestra personalidad que no amamos se volverán hostiles a nosotros.
- Los que inventemos poemas hemos acordado no decir cual es el dolor.
- Tengo hijas y hijos. Cuando uno de ellos pone una mano en mi hombro, peces brillantes se convierten de repente en el mar profundo.
- No llegamos a permanecer enteros. Vinimos a perder nuestras hojas como los arboles, los arboles que comienzan de nuevo, a partir de las grandes raíces.
- Me temo que habrá un momento en que te falle, amigo; Voy a dar la vuelta un poco lejos, nuestros ojos no se encontraran, y en el campo No habrá nadie.
- La unidad de amor mas dañada por la Revolución Industrial ha sido el vinculo padre-hijo.
- Algo en el adolescente hombre quiere riesgo, el peligro de los tribunales, va al borde, incluso al borde de la muerte.
- Poemas de amor brotaban por todo mi cuerpo.
- Anoche en mi sueño un hombre que no conocía me susurro al oído que estaba decepcionado conmigo, y que había perdido su amistad.
- Mi vida fracaso el mismo día que nací.
- Estoy orgulloso solo de aquellos días que pasan en ternura indivisa.
- Recuperar lo sagrado en nuestras vidas naturalmente nos acerca una vez mas a los manantiales de la poesía.
- Conozco a hombres que están mas sanos a los cincuenta que nunca, porque gran parte de su miedo se ha ido.
- La alegría de estar solo, comer la miel de las palabras.
- Esta bien si la gente piensa que somos idiotas. Esta bien si nos acostamos boca abajo en la tierra. Esta bien si abrimos el ataúd y subimos.
- La vela no esta encendida para dar luz, sino para testificar en la noche.
- Una parte perezosa de nosotros es como un estepicursor. No se mueve por si solo. A veces se necesita mucha depresión para que los estepicursor se muevan.
- Como una nota de música, estas a punto de convertirte en nada.
- Los ángeles comenzaron a brillar cuando lograron la disciplina.
- No es nuestro trabajo permanecer entero. Vinimos a perder nuestras hojas como los arboles, y nacer de nuevo, a partir de las grandes raíces.
- Yo era infiel incluso a la infidelidad.
- Una persona que se tira pedos discretamente en un ascensor no es un ser divino, y un hombre necesita saber esto.
- Cuando un padre, ausente durante el día, vuelve a casa a las seis, sus hijos reciben solo su temperamento, no su enseñanza.
- No quiero nada de ti, sino verte.
- Entonces somos abejas; nuestra miel es el lenguaje.
- Lo imperfecto es nuestro paraíso. Tenga en cuenta que, en esta amargura, deleite, ya que lo imperfecto es tan vivencial en nosotros.
- Dondequiera que haya agua hay alguien ahogado.
- Nunca hemos entendido como los pájaros logran volar, ni quien es el genio que inventa sueños, como el cielo y la tierra pueden aparecer en un poema.
- Lo femenino es como la luz del sol, contenida aquí y allá, a veces en cuerpo de mujer, a veces en cuerpo de hombre.
- Todo hombre que puede asumir la sensibilidad de su ser interior femenino, a menudo se siente efusivo, sociable y mas vivo.
- Cada mediodía cuando las agujas del reloj llegan a las doce, quiero atar los dos brazos juntos, y salir del banco llevando tiempo en bolsas.
- El principio del amor es un horror del vacío.
- Tendremos que llamar especialmente fuerte para llegar a Nuestros ángeles, que son difíciles de oír; se esconden en las jarras del silencio llenas durante nuestras guerras.
- Esta bien si creces tus alas en el camino hacia abajo.
- Graniza tanto, como para que yo acreciente las perlas que el forma del hocico mismo de cada tempestad.
- Si alguna ayuda llegara para sacarme de mi miseria, vendría del lado oscuro de mi personalidad.