La iluminación espiritual

Frases Juan De La Cruz

Citas Juan De La Cruz


Mas quiere Dios en ti el menor grado de pureza de conciencia que cuantas obras puedes hacer.

Consideren como han menester ser enemigas de si mismas y caminar por el santo rigor a la perfección, y entiendan que cada palabra que hablaren sin orden de obediencia se la pone Dios en cuenta.

Levantarse sobre si, no hacer asiento en cosa en nada.

La mayor necesidad que tenemos para aprovechar es de callar a este gran Dios con el apetito y con la lengua, cuyo lenguaje que el mas oye, solo es el callado amor.

Sea enemiga de admitir en su alma cosas que no tienen en si sustancia espiritual, porque no la hagan perder el gusto de la devoción y el recogimiento.

En todos los casos, por adversos que sean, antes nos hacemos de alegrar que turbar por no perder el mayor bien, que es la paz y tranquilidad del alma.

Limpio de todas aficiones, pensamientos e imágenes, el dulce canto suspires con compunción y lagrimas.

Procure siempre inclinarse no a lo mas sabroso, sino a lo mas desabrido.

Secado se ha mi espíritu, porque se olvida de apacentarse en ti.

Oh, Señor Dios mío., ¿quien te buscara con amor puro y sencillo que te deje de hallar muy a su gusto y voluntad, pues que tu te muestras primero y sales al encuentro a los que te desean?

El que no busca la cruz de Cristo, no busca la gloria de Cristo.

Una palabra hablo el Padre, que fue su Hijo, y esta habla siempre en eterno silencio, y en silencio ha de ser oída del alma.

Andar a solas con Dios; obrar en el medio; esconder los bienes de Dios.

En la noche dichosa, en secreto, que nadie me veía, ni yo miraba cosa, sin otra luz ni guía sino la que en el corazón ardía.

Siempre el Señor descubrió los tesoros de su sabiduría y espíritu a los mortales; mas ahora que la malicia va descubriendo mas su cara, mucho los descubre.

Desasida de lo exterior, desaposesionada de lo interior, desapropiada de las cosas de Dios, ni lo prospero la detiene ni lo adverso la impide.

Para venir a lo que no eres, has de ir por donde no eres.

Intimo deseo de que Dios la de lo que Su Majestad sabe que le falta para honra suya.

Los amigos viejos de Dios por maravilla faltan a Dios, porque están ya sobre todo lo que les puede hacer falta.

Oh dulcísimo amor de Dios, mal conocido. El que hallo sus venas descanso.

Procure siempre inclinarse no a lo que es consuelo, sino antes al desconsuelo.

Pues que en la hora de la cuenta te ha de pesar de no haber empleado este tiempo en servicio de Dios, ¿por que no le ordenas y empleas ahora como lo querrías haber hecho cuando te estés muriendo?

Nunca oiga flaquezas ajenas, y si alguna se quejare a ella de otra, podrá decir con humildad no le diga nada.

Si tu en tu amor, oh buen Jesús. no suavizas el alma, siempre perseverara en su natural dureza.

Doce estrellas para llegar a la suma perfección: amor de Dios, amor del prójimo, obediencia, castidad, pobreza, asistir al coro, penitencia, humildad, mortificación, oración, silencio, paz.

Quien obra con tibieza, cerca esta de la caída.

Ya que era llegado el tiempo en que de nacer había, así como desposado de su tálamo salía, abrazado con su esposa, que en sus brazos la traía, al cual la graciosa Madre en su pesebre ponía.

Oh, que bienes serán aquellos que gozaremos con la vista de la Santísima Trinidad.

No te goces en las prosperidades temporales, pues no sabes de cierto que te aseguran la vida eterna.

Veinte mis ojos, pues eres lumbre de ellos, y solo para ti quiero tenerlos.

Adviertan, pues, aquí los que son muy activos, que piensan ceñir al mundo con sus predicaciones y obras exteriores.

No se disculpe ni rehusé ser corregido de todos; oiga con rostro sereno toda reprensión; piense que se lo dice Dios.

Todo para mi y nada para ti.

No sospeches mal contra tu hermano; porque este pensamiento quita la pureza del corazón.

En mi por ti me moría, y por ti resucitaba, que la memoria de ti daba vida y la quitaba.

Procure siempre inclinarse no a andar buscando lo mejor de las cosas temporales, sino lo peor y desear entrar en toda desnudez y vacío y pobreza por Cristo de todo cuanto hay en el mundo.

Pon amor donde no hay amor, y sacaras amor.

No sabe el hombre gozarse bien ni dolerse bien, porque no entiende la distancia del bien y del mal.

En el ocaso de nuestra vida seremos juzgados en el amor.

Y el que cae ciego, no se levantara ciego solo; y, si se levantare solo, encaminara por donde no conviene.

Procure siempre inclinarse no a lo que es descanso, sino a lo trabajoso.

Pues se te ha de seguir doblada amargura de cumplir tu voluntad, no la quieras cumplir, aunque quedes en amargura.

Verdaderamente aquel tiene vencidas todas las cosas que ni el gusto de ellas le mueve a gozo ni el desabrimiento le causa tristeza.

Y si a las obras mías no esperas, ¿que esperas, clementisimo Señor mío?; ¿por que te tardas?

Para venir a lo que no posees, has de ir por donde no posees.

Mira que no reina Dios sino en el alma pacifica y desinteresada.

Un solo pensamiento del hombre vale mas que todo el mundo; por tanto, solo Dios es digno de el.

El alma que esta en unión de amor, hasta los primeros movimientos no tiene.

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