Frases de Creer
Frases sobre «Creer»
¿Me vale seguir creyendo en muchas de las cosas en las que me educaron y me enseñaron a creer desde pequeña?
La debilidad de nuestra naturaleza siempre es creernos mucho mas infelices que aquellos que gimen a nuestro lado.
Lo único que alguien necesita para ser especial es creer que puedes serlo. Se que suena como un poster de gatos, pero es verdad.
Existen dos tipos diferentes de personas en el mundo, aquellos que quieren saber, y aquellos que quieren creer.
Si quiero creer que la vida es solitaria y que nadie me ama, eso es lo que encontrare en mi mundo.
Los mandamientos de Dios son difíciles de cumplir solo si sus promesas son difíciles de creer.
Si no desatas tus ligaduras durante la vida, ¿que esperanza de liberación tendrás en la muerte? Creer que el alma se unirá a El solo porque haya abandonado el cuerpo, es una idea absurda.
Sabía usted que este proceso requiere verdaderamente creer que nuestra intención nos será concedida, así debemos mantenernos con esta frecuencia hasta experimentar lo deseado.
Nos rehusamos a creer lo que no entendemos.
Si puedes creer en algo grande, puedes conseguir algo grande.
Sabía usted que adorar o creer en un Papa te esclaviza.
Si estas lejos del enemigo, hazle creer que estas cerca.
La luz hace al hombre ver, percibir y creer.
Sabía usted que si crees que tu mundo puede cambiar, lo estás cambiando, solo cambia la forma de ver las cosas y las cosas cambian de forma, creer es crear al mismo tiempo.
Cuando jugó 45. h5 no podía creer a mis propios ojos. Última partida del encuentro Gary Kaspárov contra Anatoli Kárpov.
Quien haya sentido alguna vez la gloria de Dios dentro de el, nunca podrá creer de nuevo que el intelecto es supremo.
La felicidad es alcanzable cuando uno no tiene la idea de creer que para ser feliz es necesario sonreír todo el día.
Creeré cualquier cosa, sin importar lo salvaje y ridículo que sea, solo si hay evidencia de ello.
Sabía usted que la Fe generalmente es un término propio de la religión que se refiere al acto de creer ciegamente en algo, ya sea en una deidad o en asuntos de la propia religión.
Podría creerse que el hombre vive por un acto de voluntad suya, sin embargo no es así: desea vivir simplemente, sin saber por que, y este anhelo de vivir proviene de un deseo autónomo, la voluntad de la Naturaleza.