Frases de Ley
Frases sobre «Ley»
La unidad de Dios, es la única ley de la existencia. El otro nombre que se le da es Amor. Conocerla y ajustarse a ella es permanecer en la Vida.
El sueño del planeta incluye todas las reglas de la sociedad, sus creencias, sus leyes, sus religiones, sus diferentes culturas y maneras de ser, sus gobiernos, sus escuelas, sus acontecimientos sociales y sus celebraciones.
Si conociéramos la reencarnación y todas sus leyes. Sabríamos que no hay que esperar. Sabríamos del fruto de la siembra.
Quien difunda la felicidad obtendrá siempre circunstancias favorables que le produzcan a el mismo felicidad. Quien lleve el dolor a otros se vera inmerso, sin duda, de acuerdo con la ley del Pensamiento, en circunstancias que le produzcan miseria y dolor.
Sabía usted que el popurrí del Kama Sutra, y nos burlábamos de la ley de la gravedad, hacíamos de todo sin preguntar, y mentíamos con honestidad completa.
La opinión es como un péndulo y obedece a la misma ley.
El cambio y la conservación inalterable de energía en el cambio son la ley, no la destrucción.
La ley opera por la fe. Si crees, no es necesario ningún esfuerzo para ver el cumplimiento de todos tus deseos.
De donde resulta que ninguna sociedad puede subsistir sin autoridad, sin fuerza y, por tanto, sin leyes que moderen y controlen el ansia de placer y los impulsos desenfrenados.
Una diferencia entre la ley espiritual y la ley del ego es que la ley espiritual es muy juguetona y creativa, mientras que la ley del ego es fija y rutinaria.
La mano curativa de Dios es la Ley del Karma trabajando por la rectitud.
Sabía usted que Charles Chaplin era ateo, Adolfo Hitler era católico y Baruch Spinoza creía un Dios que se muestra a sí mismo a través del orden y la armonía de las leyes universales, un Dios en cuyo intelecto participa la mente humana.
La unidad en la variedad, y la variedad en la unidad es la ley suprema del universo.
El conocimiento, lo mismo que la fortuna, deben emplearse. La ley del uso es universal, y el que la viola sufre por haberse puesto en conflicto con las fuerzas naturales.
Si obramos desde la inteligencia de la Ley de Permanencia podemos confiar en que esto y aquello también pasara.
El amor es la Ley, el amor bajo la voluntad.
Las leyes mantienen su crédito no porque sean justas, sino porque son leyes.
La suprema ley es la salvación del estado, a la que deben responder todas las demás, tanto humanas como divinas.
Cristo vino y dijo, Te mostrare una manera mas sencilla. Si haces una cosa, harás estas ciento diez cosas, sin pensar en ellas nunca. Si amas, inconscientemente cumplirás toda la ley.
Hicimos que nuestro gobierno escribiera nuevas leyes para abolir las injusticias que nos sopesaban.