Citas Razones
Se que hay un motivo para todo. Tal vez en el momento en que se produce un hecho no contamos con la penetración psicológica ni la previsión necesaria para comprender las razones, pero con tiempo y paciencia saldrán a la luz.
Sabía usted que cada rey de las cartas representa a un gran rey de la historia; Espadas: Rey David, Tréboles: Alejandro Magno, Corazones: Carlomagno y Diamantes: Julio Cesar.
Dales a los seres queridos alas para volar, raíces para volver y razones para quedarse.
Que la paz que anuncian con sus palabras estén primero en sus corazones.
¿Donde podemos ir a buscar a Dios si no podemos verlo en nuestros corazones y en cada ser viviente?
Deja que mi alma sonría a través de mi corazón y mi corazón sonría a través de mis ojos, para poder esparcir sonrisas en corazones tristes.
Las Escrituras tienen por objeto afectar nuestros corazones y cambiar la manera como nos sentimos acerca d Dios y de su voluntad.
Cuando la tristeza funde a dos corazones, ni la gloria ni la felicidad será capaz de destruir esa unión.
En todo momento, permanezcan enamorados en sus corazones, porque ahí es donde siempre sabrán las respuestas.
Las parejas se separan por las mismas razones por las que se juntan.
Los niños de hoy en día crecen en una nueva realidad, una realidad en la que están muy desconectados de sus semejantes y mucho mas conectados que nunca, por el contrario, con las maquinas, una situación que, por razones muy diversas, resulta inquietante.
He vivido al borde de la locura, queriendo saber las razones y llamando a una puerta. Había estado llamando desde el interior.
Cuando la tristeza funde a dos corazones, ni la gloria de la felicidad será capaz de destruir esa unión. Las lagrimas son un fuego que purifica el amor, haciéndolo nítido y hermoso por una eternidad.
Los esfuerzos nunca deben ser gastados exclusivamente por razones mercenarias.
¿A donde podremos ir para encontrar a Dios si no podemos verlo en nuestros propios corazones y en cada ser vivo?
Ven a esos dictadores en sus pedestales, rodeados por las armas de sus soldados y de sus fuerzas policiales. Sin embargo, en sus corazones, hay un miedo profundo.
En la depresión se puede ver que uno de los padres, o ambos, son rechazados o que el acceso a uno de los dos es imposible, por las razones que sean.
Cuando la vida nos muestra miles de razones para llorar, muéstrale mil y una razón para reír.
Creo que es cierto que hay tantas mentes como cabezas, hay tantos tipos de amor como corazones.
A menos que Dios abra nuestros corazones, no escucharemos la verdad ni percibiremos la belleza de Cristo en el mensaje del evangelio.
Díganme 6 razones por las cuales somos mejores que los pollos. Ven, nadie puede decírmelas. ¿Saben por que? Porque los pollos son gente decente.
YO SOY el amor divino que llena las mentes y corazones en todas partes.
Dios sabe que jamás debemos avergonzarnos de nuestras lagrimas, ya que son la lluvia que barre el polvo cegador que cubre nuestros corazones.
Por lo tanto, resuélvanlo en sus corazones que no ensayaran de antemano como hacer su defensa, porque yo les daré boca y sabiduría, que todos sus opositores juntos no podrán resistir ni disputar.
Es mejor ser violento, si hay violencia en nuestros corazones, que ponerse el manto de la no violencia para cubrir la impotencia.
Los gobiernos mueven ejércitos, pero solo los individuos pueden mover corazones.
Pocos son los que ven con sus propios ojos y sienten con sus propios corazones.
La crucifixión fue abolida por razones de piedad cristiana, aunque el castigo fue sustituido por la horca para mostrar que existía la ley romana y la justicia.
Los animales del mundo existen por sus propias razones. No fueron hechos para los humanos más de lo que los negros fueron hechos para los blancos o las mujeres para los hombres. - Alice Walker
Pese a estas razones, no faltan las justificaciones de la desigualdad. La primera de ellas viene a decir que la gente tiene lo que se merece. Así como el rico merece su riqueza, premio a su emprendedor dinamismo, el pobre -por su falta de aptitud y esfuerzo- merece su opuesto destino social. Así como el leal y eficiente trabajador merece conservar su empleo, así el que lo pierde merece el escarmiento del paro, en el que merecerá quedarse si no muestra suficiente capacidad y buena disposición para la búsqueda activa de otro empleo. Oportunidades no faltan, solo hay que saberlas buscar. Esta justificación meritocrática de la desigualdad es tan demagógicamente falsa como cierto es el hecho de que nadie merece moralmente ni su azar genético ni su azar social, de por sí muy desigualmente distribuidos. Nadie merece moralmente la familia que le ha tocado en suerte, rica o pobre, decente o depravada, ni, por tanto, las oportunidades -favorables o no- que la familia pueda brindarle. Y lo mismo cabe decir de los talentos -pocos o muchos- con los que uno viene al mundo: nadie los merece moralmente.
En el corazón y el núcleo de nuestro ser, existe un si abrumador a la existencia. Este si es descubierto por aquellos que tienen el valor de abrir sus corazones a la totalidad de la vida.
El amor es el conocimiento intuitivo de nuestros corazones.
Seguramente, existen muchas razones para los divorcios; pero la principal, es y será la boda.
Desde el punto de Amor en el Corazón de Dios, que afluya amor a los corazones de los hombres, que Cristo retorne a la Tierra.
Conocer la verdad con la mente y aferrarnos a ella como un tesoro en nuestros corazones es la clave a la santidad.
Los amigos que hemos perdido no descansan bajo tierra… están enterrados en lo profundo de nuestros corazones. Así se ha ordenado que siempre nos acompañen.
Me imagino que una de las razones por las que se aferran a sus odios tan obstinadamente se debe a que el sentido, una vez que el odio se ha ido, se verán obligados a lidiar con el dolor.
Quizás las cosas que rompen nuestros corazones son las cosas que sirven para abrirlos.
Los hombres no desean la bendición en sus labios ni la verdad en sus corazones, porque la primera es producto de las lagrimas y la segunda es hija de la sangre.
Los hombres tienen corazones duros, les cuesta perdonar una pequeña ofensa. Pero el Amor, puede perdonar incluso el mas terrible de los pecados si siente verdadero arrepentimiento.
Sabía usted que nuestra forma de vivir actual nos ha hipnotizado por diferentes razones, haciendo creer a la mayoría que estamos limitados a una sola forma de vida común.
Seguramente existen muchas razones para los divorcios; pero la principal, es y será la boda.
Ahora creo que una de las razones por las que la religión se desarrollo en la forma en que lo hizo a través de los siglos fue precisamente para frenar esta inclinación asesina que tenemos como seres humanos.
Hay dos tipos de personas en la comunidad empresarial: los que producen resultados y los que le dan razones por las que no lo hicieron.
¿Realmente tenemos razones para creer que existe una realidad objetiva?
Si el mundo va a cambiar, primero tendremos que cambiar nosotros en nuestros corazones.
Cuando la alegría espiritual llena los corazones, la serpiente derrama en vano su veneno mortal.
La satisfacción completa será totalmente nuestra, si dejamos que nuestros corazones nos guíen.