Frases de Zen
Frases sobre «Zen»
El Zen aspira a concentrar la atención sobre la realidad misma, en lugar de hacerlo sobre nuestras reacciones intelectuales y emociónales ante la realidad.
El secreto del Zen son solo dos palabras: no, siempre. Así que.
El zen es la base para alcanzar la Iluminación y ejercer la maestría.
Si crees que la enseñanza del Zen es incomprensible, estarías ciego si te mantuvieras toda tu vida en una actitud tan contraria a la evidencia.
El Zen es una forma de desaprender. Te enseña como tirar lo que has aprendido, como volverte poco habilidoso de nuevo, como ser de nuevo un niño, como comenzar a existir sin mente de nuevo, como estar aquí sin ninguna mente.
La experiencia Zen, de la iluminación o de Sartori, trasciende toda categoría de pensamiento, no se interesa en ninguna abstracción ni conceptualización.
El Zen no tiene doctrina o filosofía especial, ni credo o dogma formal y enfatiza su libertad de pensamiento, esto la hace verdaderamente espiritual.
No pensar en nada es Zen. Una vez que sabes esto, caminar, sentarse o tumbarse… todo lo que haces es Zen.
La calma que proviene del estar sentado, lo alienta a uno en la vida cotidiana. Así, pues, es como uno halla el valor que tiene el Zen en la vida cotidiana, y no solo cuando se esta sentado.
No pensar sobre nada es Zen. Una vez sabes esto, caminar, sentarse o tumbarse, todo lo que haces es Zen.
Para los estudiantes Zen una hierba es un tesoro. Con esa actitud, lo que haces, la vida se convierte en un arte.
La verdad del Zen es la verdad de la vida, y la vida significa vivir, moverse, actuar, no simplemente reflejar.
En el budismo Zen la alimentación se concibe como kaisek término que hace referencia a la forma de conseguir la armonía la naturaleza y la moderación.
He vivido con muchos maestros Zen, muchos de ellos eran gatos.
Este es el enfoque del Zen: nada tiene que ser hecho. No hay nada que hacer. Uno solo tiene que ser. Tomate un descanso, se normal y se natural.
Si quieres viajar por el camino de los Budas y los maestros zen, entonces no esperes nada, no busques nada, y no comprendas nada.
El Zen no es una filosofía, no es una psicología, no es una doctrina.
El secreto del Soto Zen son solo dos palabras: no siempre así. En japonés, son dos palabras en ingles. Ese es el secreto de nuestra practica.
La esencia del Zen no se expresa con palabras.
La vida de un maestro zen es una continua equivocación.