La iluminación espiritual

Frases Contemplar

Citas Contemplar


Tu tarea consiste en contemplar las energías de la vida, el amor, la belleza y la amabilidad.

Sabía usted que debemos comprender la riqueza de nuestra imaginación y desde ahí contemplar el mundo de las diferentes posibilidades y realidades que podemos crear.

Todos nosotros no somos capaces de contemplar con una mirada interior las grandes profundidades de la vida, y es cruel exigir de aquel que tiene la vista bajada que distinga lo que es oscuro y lejano.

Uno puede contemplar todas las deidades si retrae la mente inquieta y se adentra en el Catasta.

Si te mantienes atento a la belleza y si te das tiempo para contemplarla, tu cuerpo no sufrirá.

Todas las personas deberían reservarse un tiempo para la introspección, alejarse de la rutina para contemplar y reflexionar sobre la vida.

El Alquimista, nunca necesitara contemplar el desierto; el sabe el secreto, que solo basta con considerar un simple grano de arena, para ver en el todas las maravillas de la Creación.

Para comprender desde la verdad, es preciso contemplar: salirse y observar. Así sobreviene un silencio psicológico y se vive todo lo nuevo, toda la verdad.

El mayor bien del evangelio es el don de contemplar y deleitarse en la gloria de Dios en Cristo por siempre.

Sabía usted que si deseas contemplar tú debilidad no la gratifiques.

Aquel que es Vuestro Señor, el Todo misericordioso, abriga el deseo en Su corazón de contemplar a toda la raza humana como a una sola alma y un solo cuerpo.

Debemos comprender la riqueza de nuestra imaginación y desde ahí contemplar el mundo de las diferentes posibilidades y realidades que podemos crear.

En ese claro y apacible lago de la conciencia, podemos contemplar entonces la imagen de Dios que se refleja en nuestro interior.

Aprender a contemplar es aprender a vivir totalmente. Cuando la mente no es contemplativa, cuando no se ha contemplado el silencio, la vida carece de sentido, esta llena de contradicciones.

El grado sumo del saber es contemplar el por que.

Es necesario hacer silencios en la mente y en las emociones para contemplar y experimentar directamente la vida.

La presencia es contemplarse a usted mismo entendiendo que la contemplación desaparecerá, pero el contemplador permanece.

Simplemente nacemos con un alma inmortal y no la cambiamos jamás, pudiendo contemplar a Dios una vez morimos.

La unidad que se crea al contemplar, deshace todas las dudas que la separación creo.

La gente odia la idea de perder. Cualquier perdida, por pequeño que sea, es tan horrible de contemplar que se compensan mediante la compra de seguros, incluidas las políticas totalmente absurdas, como el transporte aéreo.

Contemplar es acceder a lo natural; por eso ha de ser sencillo, aunque a partir de nuestros hábitos nos parezca complicado.

Para contemplar hay que atravesar el silencio. Desde el bullicio del pensar, sentir, desear, temer, no se presentara la contemplación.

Todos ambicionamos la felicidad, pero la mayoría de nosotros la buscamos fuera de nosotros mismos; en otras personas, en el trabajo, o en las actividades meramente ociosas. Conforme envejecemos nuestros sueños se desvanecen lentamente. Vamos convirtiéndonos en personas menos idealistas, más pragmáticas. Nos conformamos con lo que tenemos y tratamos de ser filosóficos en relación a esos sueños que nunca se cumplieron, o que sí se cumplieron pero resultaron estar vacíos de la promesa que en otro tiempo habían guardado. En su mayoría nuestras vidas se van asentando sobre moldes previsibles, y mientras tanto lo único que hacemos es contemplar tristemente nuestros sueños rotos o vacíos. En su poema "La Puerta", el poeta e inmunólogo checo Miroslav Holub nos incita a tener el valor de contemplar nuestras vidas con nuevos ojos.

Sabía usted que la capacidad de contemplar esta espléndida visión y meditar acerca de ella constituye ya un regalo inapreciable.

Lo mas sencillo es contemplar.

En la verdadera comprensión se presenta lo real directamente en una simple toma de conciencia. A eso lo llamamos contemplar.

Un ser humano cuando puede contemplar con la mente, le sucede algo inesperado: es consciente de que la Realidad esta precisamente en lo desconocido.

Suponiendo que existen, no todos podemos tener el privilegio de verlas, ya que se dice que solo aquellas personas que poseen un alma pura (los niños especialmente) son capaces de contemplarlas.