1 - Cultivar una mente ecuánime, que no se aferra a tener razón ni a estar equivocada, te llevara a un estado de ser presidido por la frescura. La cesación ultima del sufrimiento procede de ese estado.
1 - Aquellos cuya mente permanece en equilibrio, se sobreponen a todas las cosas de la tierra. El Eterno es ecuánime e incorruptible: y por lo tanto, descansan en el Eterno.