1 - Existe tanta diferencia entre las cabezas como entre los paladares.
1 - Sabía usted que Charles Chaplin era ateo, Adolfo Hitler era católico y Baruch Spinoza creía un Dios que se muestra a sí mismo a través del orden y la armonía de las leyes universales, un Dios en cuyo intelecto participa la mente humana.