La iluminación espiritual

Dios infinito

POR: DESPERTAR CONSCIENCIA

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OMNISCIENTE

  1. Aunque la conceptualización de Dios ha sido tema de debate en diversas épocas y distintas civilizaciones, debemos saber que él es un Ser completamente real.
  2. Dios es infinito y nosotros los seres humanos imperfectos y limitados nos resulta incomprensible e inaccesible comprender a Dios en su totalidad.
  3. El poder y la sabiduría de Dios son mucho más grandes de lo que nosotros los humanos podemos comprender, estos son infinitos.
  4. El concepto teológico, filosófico y antropológico de Dios hace referencia a la suprema deidad creadora de todo el universo y de los seres humanos.
  5. Dios es el creador y supervisor del universo, debemos saber que el es omnipotente, omnipresente y omnisciente, no existe nada imposible para él.
  6. Dios tiene el poder absoluto sobre todas las cosas, tiene el poder para estar presente en todo lugar y el poder de saber las cosas que han sido, que son y que serán.
  7. Dios es un Ser que ha existido por Sí mismo desde siempre, él es infinitamente perfecto, es el creador de cielo y tierra, y soberano Señor de todas las cosas.
  8. Dios no necesita de nada ni de nadie para existir, Dios es auto-existente y auto-suficiente y ningún ser creado puede comprender plenamente toda su naturaleza.
  9. Debemos saber que Dios sigue siendo el mismo que ha sido desde la eternidad, él es un Espíritu con características y atributos personales.
  10. Debemos saber que nosotros, su creación podemos restaurar nuestra vida actual en sintonía con él, siendo purificados continuamente permaneciendo en santidad.
  11. El ir conociendo a Dios creador del universo por decisión propia, será parte de nuestra autentica misión en esta tierra y el verdadero propósito que tenemos.
  12. En la actualidad Dios está preparando el escenario y moldeando los eventos mundiales para cumplir las profecías bíblicas del final de los tiempos.
  13. Ahora nuestro Padre eterno nos da la oportunidad de tener una relación personal con él y así estando en sincronía poder verdaderamente cumplir nuestra meta eterna.
  14. Nuestro Dios todopoderoso, desea que nosotros vayamos hacia él, pero no de manera forzada por su poder infinito, sino voluntariamente atraídos por su amor.
  15. Después del juicio final, el universo entero, liberado de la esclavitud de la corrupción, participará de la gloria de Dios, inaugurando la Tierra nueva.
  16. Debemos saber que la muerte terrenal no es nuestro fin, sino todo lo contrario, es el comienzo de una vida nueva.
  17. La vida eterna es la que comienza inmediatamente después de la muerte, nuestro cuerpo corruptible se transformará en un cuerpo glorioso.
  18. Nuestro cuerpo humano habrá de transformarse, adquiriendo unas características totalmente diferentes de este cuerpo corruptible y mortal que ahora poseemos.
  19. La transformación será de un cuerpo corruptible a un cuerpo incorruptible y en el cielo disfrutaremos para siempre en cuerpo y alma de la vida con Dios.
  20. Después del primer cielo y de la primera tierra, existirá un nuevo cielo y una nueva Tierra, allí habrá vida de felicidad perfecta para los que han amado a Dios desde aquí.
  21. Esta nueva ciudad extremadamente bella y maravillosa, Dios la tiene preparada para todos los que lo amaron y verdaderamente realizaron su voluntad aquí en la tierra.
  22. Nuestro nuevo hogar celestial se describe, como el paraíso de Dios, como una ciudad nueva, santa y gloriosa.
  23. Esta tierra prometida, nuestra herencia, estará compuesta de los que se han redimido desde el principio y hasta el fin de los días.
  24. Dios ya tiene preparada la morada en este paraíso celestial, a todos aquéllos que lo buscaron de corazón en la tierra y tuvieron una vida integra, recta y justa.
  25. Es por ello que mientras vivamos en este plano físico debemos poner principalmente la mirada en las cosas de arriba, en nuestro futuro hogar y no en las de la tierra.
  26. Ya que si no buscamos la presencia de Dios en este mundo, tampoco nos gustara su presencia en el cielo.
  27. Si durante nuestra vida, hemos tenido una vida conforme a los principios de Dios, entonces regocijaos de que nuestros nombres están escritos en los cielos.
  28. Debemos saber que realmente existe un mundo feliz más allá, donde moraremos los que verdaderamente amamos ahora a nuestro Dios creador y Padre Celestial.

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